LUPUS Y ALIMENTACIÓN




La correcta alimentación es un factor que influye mucho en la mejoría del paciente con lupus.



Las dietas drásticas deben ser evitadas pues éstas no permiten al individuo una nutrición completa. Estas dietas, por su propia naturaleza, no están balanceadas en forma apropiada y no son adecuadas para una buena nutrición.

Se debe entender que para que las células funcionen en una forma normal, requieren adecuada nutrición. Hoy en día sabemos que tanto los anticuerpos como la función celular en general y especialmente de aquellas células del sistema inmunológico, pueden ser afectadas en forma adversa, si hay deficiencias en la nutrición o desequilibrio nutricional. De tal manera que se recomienda que se siga una dieta balanceada para que no haya efectos nocivos, en una red tan compleja como es el sistema inmunológico, si se utilizan dietas inadecuadas.


Ciertos pacientes de lupus y aún algunos médicos creen que los suplementos vitamínicos pueden ayudar a mejorar la enfermedad. Estos casos no se pueden descontar, pero existen otras explicaciones para la mejoría, antes de que se pretenda que las vitaminas son la única causa del alivio.



En primer lugar, el lupus se caracteriza por remisiones y exacerbaciones de tipo espontáneo. Si esa remisión ocurriera durante el tiempo en que el paciente esté tomando suplementos vitamínicos o cualquier otra terapia no tradicional, se atribuiría en forma incorrecta, la mejoría, al cambio de la dieta.




En segundo lugar, algunas manifestaciones del LUPUS tales como la fatiga y la debilidad tienen un componente psicológico significativo además del problema físico. Si uno no se siente bien, hay una tendencia a volverse inactivo. Esto se puede volver un círculo vicioso en el cual la inactividad lleva a mayor inactividad y debilidad, lo cual es un problema serio en cualquier enfermedad crónica. Si el paciente cree en las vitaminas, esta creencia puede afectar al componente psicológico y hacer que el paciente se sienta mejor, tornándose más activo y disfrutando de una sensación de salud. El paciente puede atribuir su mejoría al efecto terapéutico de las vitaminas, aunque éstas no hayan tomado parte alguna en el proceso.



Hace algunos años se creía que algunas vitaminas tenían cierto efecto en el LUPUS, pero investigaciones llevadas a cabo sobre este efecto no confirmaron esta creencia.
Sólo muy recientemente hemos empezado a comprender la importancia de los factores nutricionales en muchas de las enfermedades. La necesidad de una dieta balanceada que contenga cantidades moderadas de todo tipo de alimento, se destaca como un principio generalmente aceptado. Las dietas drásticas que propenden a un exceso o exclusión de ciertos tipos o grupos de alimentos, son más dañinas que beneficiosas. Debemos reconocer, así mismo, que necesitamos llevar a cabo investigaciones más exhaustivas sobre la nutrición, antes de que podamos apreciar en forma total e inteligente el tratamiento nutricional de las enfermedades como el LUPUS.




También se estudian otros aspectos de la dieta relacionada con el LUPUS. Un grupo de investigadores ha descubierto que algunos animales cuadrumanos (monos) presentan algunas de las manifestaciones del LUPUS si se les da de comer demasiadas semillas y brotes de alfalfa, al parecer, los retoños de alfalfa contienen un aminoácido poco común llamado L-cavanina. Todavía se está estudiando la relación entre este descubrimiento y el LUPUS humano. Es necesario indicar que el brote de alfalfa es uno de los alimentos sugeridos por las llamadas dietas nutritivas.
También se investigan los efectos de la alteración de calorías y otros alimentos con que se nutren las diferentes cepas de ratones que contraen LUPUS. Otros investigadores estudian la forma en que estos ratones responden inmunológicamente a los alimentos, ya que la dieta es la fuente principal de substancias ajenas al cuerpo. Aunque se han encontrado algunas irregularidades, todavía es muy prematuro presentar observaciones de valor o aplicación de éstas en el LUPUS humano. También se estudia el valor del ácido eicosapentanoico, un componente poliunsaturado de cierta clase de aceite de pescado, como suplemento nutritivo, que afecta las reacciones inflamatorias y la función del sistema inmunológico.


Es muy importante tomar en cuenta su alimentación, si Usted no se encuentra seguro de que esa llevando una alimentación correcta, lo recomendable sería consultar un nutriólogo para que lo guíe en esta importante tarea.

Vida Sexual y Lupus:fertilidad, métodos anticonceptivos, menstruación, aborto y menopausia.

Durante muchos años se pensó que las pacientes con lupus no podían embarazarse, sin embargo las investigaciones han demostrado que no existe infertilidad en lupus, aunque si riesgo de activarlo o problemas con el producto.
En cuanto al uso de las pastillas anticonceptivas, no existe un consenso general, porque contienen estrógenos. Hay quienes las prohíben definitivamente y quienes seleccionan las pacientes que las deben tomar. La causa de esta discordancia es porque cuando aparecieron en el mercado éstas píldoras a principios de los años 60, se publicaron numerosos reportes de reactivación a aparición de lupus con el uso de ellas. Posteriormente la cantidad o concentración de estrógenos ha venido disminuyendo, y muchas mujeres con lupus los toman sin problemas. Otro motivo, es que en un principio contenían una sustancia como conservador llamado tartrazina, que es una amina aromática que supuestamente predispone al lupus. Los nuevos anticonceptivos ya no tienen esta sustancia. Los criterios que si son muy estrictos para la contraindicación de éstos estrógenos en la cantidad que sea, son: pacientes con presión arterial alta, migraña u otra causa de dolor de cabeza no bien clara, elevación de colesterol o triglicérido, historia de problemas de coagulación y más recientemente y en forma definitiva, los pacientes con anticuerpos antifosfolípidos. El riesgo es de reactivación del lupus y aparición de embolias venenosas y arteriales.
Los anticuerpos de barrera como diafragmas o dispositivos intrauterinos, tienen el riesgo de infectarse con frecuencia. El uso del condón parece ser el más seguro.
Los mismos principios de los anticonceptivos mencionados anteriormente, son válidos para el uso en las pacientes en período de menopausia, aunque por otro lado, estos pacientes tienen un curso más benigno por la supresión de la función ovárica, y muchos pacientes, se controlan con sólo aspirina o algún otro AINE.
Los pacientes con lupus, experimentan discretas a moderadas reactivaciones durante el período menstrual, que no requieren ajuste importante a las medicaciones, y con sólo aumentar la dosis de AINEs y reposo se pueden controlar. Los abortos espontáneos o provocados, pueden reactivar en forma severa el lupus y en varios pacientes estos son el detonador para el inicio de la enfermedad. Si es necesario el legrado uterino cuando el aborto está en evolución, es necesario triplicar la dosis de cortisona en su equivalente intravenoso la hidrocortisona, para evitar reactivaciones.
Las publicaciones de los años 60s, con respecto al aborto terapéutico, en pacientes con lupus, en la actualidad son totalmente obsoletas, ya que no está por ningún motivo justificado interrumpir un embarazo en lupus a excepción de los casos especiales en donde existe contraindicación de embarazo y está en peligro la vida de la madre.
Las relaciones sexuales se llevan a cabo sin ningún problema ni contraindicación, excepto en pacientes en quienes está asociado un síndrome de Sjöre, con sequedad importante de la mucosa vaginal que requiere el uso de jalea lubricante, para evitar lesión de la mucosa con dolor y en pacientes con necrosis aséptica de las cabezas femorales, existen problemas por la separación de los miembros que se encuentra muy limitada mientras no se hayan operado con reemplazo total del hueso.
FUNDACIÓN MEXICANA DE LUPUS

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*** ORIGEN ***






La causa exacta de la enfermedad es desconocida, y no hay consenso en si es una sola circunstancia o un grupo de enfermedades relacionadas.




Sin embargo, al tratarse de una enfermedad autoinmune hay distintos factores que pueden influir en el sistema inmunológico y provocar lupus.




Se han supuesto varias hipótesis, entre ellas la genética y la ambiental.




La exposición a la luz solar también podría ser un factor provocador de la patología. De hecho, muchos individuos con lupus tienen fotosensibilidad a los rayos ultravioletas. Asimismo, las hormonas, en concreto los estrógenos femeninos, se han propuesto como causantes de la enfermedad. De hecho, se ha observado que las píldoras anticonceptivas pueden acelerar su aparición en mujeres genéticamente predispuestas.




Se cree que es una reacción de hipersensibilidad del tipo III (enfermedad del suero), que se caracteriza por la producción de anticuerpos que actúan en contra de los componentes nucleares de las propias células.






Hay tres mecanismos por los cuales se piensa que el lupus se desarrolla, a saber:






GENÉTICA



El primer mecanismo en la aparición del LES puede que sea por predisposición genética.



Las investigaciones indican que el lupus eritematoso sistémico puede tener un vínculo genético.



A pesar de que el lupus corre en familias, no se ha identificado un gen causal.



De hecho, son varios los genes que necesitan verse afectados para que la predisposición del individuo para desarrollar lupus se vea afectada con el contacto con factores ambientales, y los genes más importantes se localizan en el cromosoma 16.





Estos genes pueden producirse aleatoriamente o ser el resultado de una herencia.



Además, quien sufre de LES presenta alterados los sitios vinculantes del gen RUNX-1, que puede ser la causa o contribuir (o ambas cosas a la vez) a este estado.



La alteración de los lugares vinculados del RUNX-1 también se ha encontrado en pacientes con psoriasis y artritis reumatoide.



Otros genes que contienen variantes para el LES incluyen IRF5—el gen del interferón—, PTPN22, STAT4, CDKN1A, ITGAM, BLK—una tirosincinasa TNFSF4y BANK1—un regulador de la señalización celular.






CAUSA AMBIENTALES



El segundo mecanismo de iniciación de la enfermedad del lupus puede deberse a factores medioambientales. Estos factores no sólo pueden agravar el estado de un lupus ya existente, sino que también pueden desencadenar un inicio de la enfermedad. Entre las causas de este tipo se incluyen ciertos medicamentos (como algunos antidepresivos y antibióticos), estrés extremo, exposición a los rayos solares (ultravioleta), ciertas hormonas e infecciones. Algunos investigadores se han esforzado en encontrar una conexión entre ciertos agentes infecciosos (virus y bacterias), pero no se ha podido vincular consistentemente ningún patógeno a la enfermedad.
Se ha demostrado que la luz ultravioleta puede desencadenar un eritema fotosensible característico en pacientes con lupus y algunas evidencias apuntan a que la luz ultravioleta pueda ser capaz de alterar la estructura del ADN, conllevando a la formación errática de anticuerpos. Las hormonas sexuales como el estrógeno juegan un papel importante en la aparición del LES y se ha observado que su aparición en la edad reproductiva es 10 veces mayor en mujeres que hombres. Se ha especulado que los implantes de mama basado en silicona insitan la producción de anticuerpos anti-colágeno, pero no hay evidencias aún de una asociación entre dichos implantes y el LES. Igualmente, son pocas las evidencias que involucren el lapiz labial con el lupus.






MEDICAMENTOS



Finalmente, hay un lupus inducido por medicamentos. Es un estado reversible que normalmente se produce en pacientes que han sido tratados de una enfermedad a largo plazo, al menos 3 a 6 meses.
El lupus inducido por drogas imita al lupus sistémico. Generalmente, una vez que el paciente ha dejado la medicación que desencadenó el episodio, no se repiten ni signos ni síntomas de lupus. Hay cerca de 40 medicamentos actualmente en uso que pueden causar este estado, si bien las drogas más comunes son la procainamida la hidralacina y la quinidina.

HISTORIA DEL LUPUS



La historia del lupus eritematoso se puede dividir en tres periodos:


el clásico, el neoclásico y el moderno.






PERIODO CLÁSICO


- comienza cuando la enfermedad fue reconocida por primera vez en la Edda Media se vio la descripción de la manifestación dermatológica de la enfermedad.



- El término lupus se atribuye al médico del siglo XII Rogerius, quién lo utilizó para describir el eritema malar clásico.




PERIODO NEOCLÁSICO




- éste se anunció con el reconocimiento de Móric Kaposi en 1872 de la manifestación sistémica de la enfermedad.




PERIODO MODERNO


- Empieza en 1948 con el descubrimiento de las células del lupus eritematoso (aunque el uso de estas células como indicadores de diagnóstico ha sido ahora abandonado en gran parte) y se caracteriza por los avances en nuestro conocimiento de la fisiología patológica y las características clínicas y de laboratorio de la enfermedad, así como los avances en el tratamiento.



- La medicación útil para la enfermedad fue descubierta por primera vez en 1894, cuando se divulgó por vez primera que la quinina era una terapia efectiva.



- Cuatro años después, el uso desalicilatos en conjunción con la quinina demostró ser todavía más beneficioso. Este fue el mejor tratamiento disponible para los pacientes hasta mediados del siglo veinte cuando Hench descubrió la eficacia de los corticoesteroide en el tratamiento del lupus eritematoso sistémico.

ETIMOLOGÍA DE LUPUS



- El término “lupus” significa “lobo”, probablemente debido a que el rostro inflamado del paciente adopta una gran similitud con la cara de un lobo.








- La enfermedad normalmente exhibe (en nariz y mejillas) un eritema malar con forma de alas de mariposa. De allí “erythro” que deriva del griego ερυθρός, rojo.







- Más extraño todvía es el informe de que el término lupus no proviene directamente del latín, sino de un estilo francés de máscara (Loup-lobo de carnaval) que las mujeres vestían alrededor de los ojos.

TIPOS DE LUPUS

Existen tres tipos de lupus: discoide, sistémico y el secundario a medicamentos.

El lupus discoide (cutáneo)

Siempre se limita a afectar la piel. Se le identifica por ronchas que aparecen en la cara, cuello y la piel del cuero cabelludo. El diagnostico de lupus discoide se corrobora con una biopsia de éstas ronchas. En ésta biopsia se observan cambios anormales que no existen en la piel sana o sin ronchas. El lupus Discoide habitualmente no afecta los organos internos del cuerpo y por este motivo el examen de los anticuerpos antinucleares (AAN) que se usa para diagnosticar la forma Sistémica del lupus es negativa en estos pacientes. Sin embargo, en un gran numero de personas con esta forma de lupus, los AAN son positivos aunque a niveles o títulos bajos.
Aproximadamente el 10% de los pacientes con lupus discoide pueden cambiar a la forma sistémica de la enfermedad, la cual afecta casi cualquier órgano del cuerpo. Esto no es posible predecir o prevenir. El tratamiento del lupus discoide no previene la progresión a la forma sistémica. Los pacientes que progresan a ésta forma de la enfermedad, probablemente tenían lupus sistémico desde el principio, con las ronchas discoides como principal síntoma.

El lupus sistémico

Es generalmente más severo que el lupus discoide y puede afectar casi cualquier órgano del cuerpo. En algunas personas, se puede afectar solamente la piel y las articulaciones. En otras, se afectan las articulaciones, pulmones, riñones y otros órganos o sistemas. Por lo general, no hay dos pacientes con lupus sistémico que tengan síntomas idénticos. En el lupus sistémico se pueden presentar periodos en donde pocos o ningún síntoma estén presentes (periodos de "remisión") o en donde la enfermedad esté activa ("recaidas".) Con mayor frecuencia cuando la gente menciona la palabra "lupus" se refiere a la forma sistémica de la enfermedad.

El lupus secundario a medicamentos

Se presenta después de algún tiempo de tomar fármacos recetados para diferentes enfermedades (que no son lupus). Los síntomas de éste tipo de lupus son similares a aquellos de la forma sistémica. Los medicamentos relacionados mas frecuentemente con éste tipo de lupus son la hidralazina (empleada para tratar la presión alta o hipertensión arterial) y la procainamida (que se usa para el tratamiento de las alteraciones del ritmo cardiaco). El lupus inducido por medicamentos es mas comun en los hombres, dado que éste tipo de fármacos son prescritos mas frecuentemente en pacientes del sexo masculino. Sin embargo, solamente el 4% de la gente que toma éste tipo de medicinas desarrollará anticuerpos sugestivos de lupus. De éste 4%, solo un numero extremadamente pequeño presentará este tipo de lupus. Los síntomas generalmente van disminuyendo cuando se suspenden éstos medicamentos hasta desaparecer.
Aunque el lupus secundario a fármacos y el lupus discoide tienen síntomas en comun o muy parecidos, el resto de éste panfleto se referirá primordialmente a la forma sistémica de la enfermedad.